Premio al mérito y a la erosión: Chile superó con justicia 1-0 a Suiza (¡que por fin recibió un gol!)
Merecidamente, por ser el que más intentó, Chile derrotó a Suiza 1-0 y sacó provecho del hombre de más por la expulsión del suizo Behrami a los 38' de la primera parte. Marcelo Bielsa acertó con los cambios tras el descanso y Chile fue erosiando a los suizos con el correr de los minutos. El gol de González sentenció y produjo un gol histórico: chile batió finalmente el arco invicto de los suizos si tomamos Alemania 2006 y lo que llevaba Sudáfrica 2010.
| 21/06/2010 | 11:19
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) Gran triunfo de Chile además de histórico. El equipo de Marcelo Bielsa ganó un partido vital para sus aspiraciones luego de un gran trabajo además de sostenido.
Chile asumió el rol protagónico desde el vamos y lo intensificó tras la expuslión de Behrami en el primer tiempo. Además, Bielsa acertó en los cambios en el descanso y se pudo hacer justicia. La verdad, ha sido un premio al mérito, el trabajo y la planificación. Bien por los sudamericanos que le siguen haciendo honor a la causa.
Mejor Chile desde el arranque del partido. Fiel al estilo Bielsa, Chile asumió las responsabilidades y desplegó su equipo ocupando todo el frente de ataque. En tanto, Suiza, equipo que se arma bien en lo defensivo y es muy duro en este sentido, aguantó los primeros embates chilenos que fueron con tiros desde afuera del área bien respondidos por su arquero.
Chile y su ambición hicieron que se muestre mejor y más decidido en el partido. En tanto, la pelota quedaba bien lejos del arco de los dirigidos por Marcelo Bielsa. De eso se trata también esta historia.
La presencia de Humberto Suazo en el comienzo de este juego, le dio a los chilenos más profundiad posicional que se tradujo en que el resto de los futbolistas de ataque tengan mejor compañía y presencia ofensiva. Aunque cuando se promediaban los 20' no hubieron jugadas que plasmaran en el juego este beneficio.
En el momento que Suiza parceió decidirse a adelantar sus líneas, Behrami le tiro un manotazo a un defensor chileno en pleno forcejeo y se quedó con un hombre menos cuando iban 30'. En un partido cerrado como este, se había producido un quiebre fundamental para el partido.
La duda era saber si Chile podía aprovechar la 'celosa' decísión del árbitro de cara al resto del partido. Al menos, por lo que se vio en el final de la primera parte, Chile se percató del impacto anímico de los suizos y lo fue a buscar abiertamente. El problema sin reolución para Chile en la primera parte fue que avanzó en vez de atacar. Dos cosas diametralmente opuestas.
Tras una movida de piezas en el descanso, el equipo de Marcelo Bielsa salió decido a arrollar a Suiza. Fue notable la intencionalidad del equipo trasandino para atacar y se veía venir un gol. Chile le rodeó la mazana a Suiza que resistía los acosos chilenos en ofensiva. El complemento se planteó muy claro: Chile le inclinó la cancha y fue por la victoria.
A los 64' quedaron claras y evidenciadas las intenciones de Bielsa. Sacó al mediocampista Matías Fernández (flojito por ahora) y mandó adentro al delantero Esteban Paredes. La idea chilena fue intensificar mayor presencia ofensiva para la última media hora de juego. Y Bielsa acertó.
A falta de 15', un ataque profundo de Chile con Paredes que eludió al arquero, terminó en un centro que González empujó al gol con un inteligente y complicado cabezazo. Chile pasaba a ganar justamente el partido´y quebraba la resistencia del equipo suizo.
Lo acertado de Chile después del gol, fue seguir con ambición y no anotó el segundo gol porque Paredes no estuvo fino en dos ocasiones. Eso es lo que pregona Bielsa con sus jugadores y esta vez los chilenos cumplieron a rajatabla. Delira todo Chile. Bielsa y sus jugadores consiguieron los 6 puntos en sus primeras presentaciones.
Con esta victoria justa y bien trabajada, a pesar del gran susto del final cuando Suiza falló el empate en su única jugada profunda, Chile se acerca a los octavos de final cuando le resta el partido más duro con España. Bien por Chile. Y bien por Marcelo Bielsa porque logró imponer su estilo ante un equipo duro como Suiza. Si tiene dudas de lo que decimos, pregúnteselo a España...
| 21/06/2010 | 11:19
Chile asumió el rol protagónico desde el vamos y lo intensificó tras la expuslión de Behrami en el primer tiempo. Además, Bielsa acertó en los cambios en el descanso y se pudo hacer justicia. La verdad, ha sido un premio al mérito, el trabajo y la planificación. Bien por los sudamericanos que le siguen haciendo honor a la causa.
Mejor Chile desde el arranque del partido. Fiel al estilo Bielsa, Chile asumió las responsabilidades y desplegó su equipo ocupando todo el frente de ataque. En tanto, Suiza, equipo que se arma bien en lo defensivo y es muy duro en este sentido, aguantó los primeros embates chilenos que fueron con tiros desde afuera del área bien respondidos por su arquero.
Chile y su ambición hicieron que se muestre mejor y más decidido en el partido. En tanto, la pelota quedaba bien lejos del arco de los dirigidos por Marcelo Bielsa. De eso se trata también esta historia.
La presencia de Humberto Suazo en el comienzo de este juego, le dio a los chilenos más profundiad posicional que se tradujo en que el resto de los futbolistas de ataque tengan mejor compañía y presencia ofensiva. Aunque cuando se promediaban los 20' no hubieron jugadas que plasmaran en el juego este beneficio.
En el momento que Suiza parceió decidirse a adelantar sus líneas, Behrami le tiro un manotazo a un defensor chileno en pleno forcejeo y se quedó con un hombre menos cuando iban 30'. En un partido cerrado como este, se había producido un quiebre fundamental para el partido.
La duda era saber si Chile podía aprovechar la 'celosa' decísión del árbitro de cara al resto del partido. Al menos, por lo que se vio en el final de la primera parte, Chile se percató del impacto anímico de los suizos y lo fue a buscar abiertamente. El problema sin reolución para Chile en la primera parte fue que avanzó en vez de atacar. Dos cosas diametralmente opuestas.
Tras una movida de piezas en el descanso, el equipo de Marcelo Bielsa salió decido a arrollar a Suiza. Fue notable la intencionalidad del equipo trasandino para atacar y se veía venir un gol. Chile le rodeó la mazana a Suiza que resistía los acosos chilenos en ofensiva. El complemento se planteó muy claro: Chile le inclinó la cancha y fue por la victoria.
A los 64' quedaron claras y evidenciadas las intenciones de Bielsa. Sacó al mediocampista Matías Fernández (flojito por ahora) y mandó adentro al delantero Esteban Paredes. La idea chilena fue intensificar mayor presencia ofensiva para la última media hora de juego. Y Bielsa acertó.
A falta de 15', un ataque profundo de Chile con Paredes que eludió al arquero, terminó en un centro que González empujó al gol con un inteligente y complicado cabezazo. Chile pasaba a ganar justamente el partido´y quebraba la resistencia del equipo suizo.
Lo acertado de Chile después del gol, fue seguir con ambición y no anotó el segundo gol porque Paredes no estuvo fino en dos ocasiones. Eso es lo que pregona Bielsa con sus jugadores y esta vez los chilenos cumplieron a rajatabla. Delira todo Chile. Bielsa y sus jugadores consiguieron los 6 puntos en sus primeras presentaciones.
Con esta victoria justa y bien trabajada, a pesar del gran susto del final cuando Suiza falló el empate en su única jugada profunda, Chile se acerca a los octavos de final cuando le resta el partido más duro con España. Bien por Chile. Y bien por Marcelo Bielsa porque logró imponer su estilo ante un equipo duro como Suiza. Si tiene dudas de lo que decimos, pregúnteselo a España...
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